sábado, 8 de noviembre de 2014

Una de las metas más difíciles de alcanzar


En los últimos años mucho se habla de educación, de una buena educación, ya que vivimos en un tiempo en el cual día tras día la modernización avanza progresivamente, pero la pregunta es ¿Existe una educación de alto nivel aquí en el Perú? La verdad es que no, la educación en el Perú, a mi parecer, es uno de nuestros puntos débiles. La educación es sin lugar a dudas la base del desarrollo de cualquier país, ya que es el motor de cada lugar en el mundo para poder compartir conocimientos y lograr ser un país culto y reconocido a nivel mundial.
Este aspecto fundamental es un proceso de aprendizaje y enseñanza que se desarrolla a lo largo de toda la vida y que contribuye a la formación integral de las personas, al pleno desarrollo de sus potencialidades, a la creación de cultura, y al desarrollo de la familia y de la comunidad nacional y mundial. Se desarrolla en instituciones educativas y en diferentes ámbitos de la sociedad.
Sin embargo hablar de educación en el Perú, implica muchas cuestiones; como por ejemplo: ¿Se aplica la nueva educación moderna en todas las instituciones educativas?, ¿Qué porcentaje de la población estudiantil culmina sus estudios básicos?, ¿El gobierno aplica una misma política educativa a todas las instituciones del país?, ¿Las instituciones educativas tienen la misma técnica educativa que favorezca a todos los estudiantes?
Lo cierto es que los gobernantes, lejos de mejorar la calidad educativa, la agudizan más, ahora con esta coyuntura política, todos los candidatos ofrecen mejorar la educación, muchos años se han venido escuchando estas promesas, sin embargo la educación sigue igual o peor que antes, la aparición de las escuelas privadas hoy en día son muchas, pero de qué manera compiten con las escuelas públicas, ¿qué exigencias cumplen? La educación en el Perú requiere de una reforma que se cumpla, que no sea sólo una promesa “cumplida a medias”.


“El maestro en la educación, sin una reforma drástica del sentido y la manera de educar en las instituciones educativas peruanas, no hay manera de que los egresados puedan ser competitivos respecto a las demandas de la globalización” (León Trahtemberg).
La mayoría de las Instituciones Educativas (privado y público), de nuestro país siguen trabajando con un modelo educativo tradicional; memorístico, tal es así que organismos internacionales han declarado en emergencia la educación peruana, alejada de la realidad, actualmente.
Es verdad que hoy en día, la globalización nos exige estar más capacitados en tecnología, comunicaciones, diferentes idiomas; entonces, ¿Los estudiantes que culminan sus estudios básicos en que pueden desempeñarse? Teniendo en cuenta que no todos realizan sus estudios superiores, ya sea en la universidad, en un instituto técnico, etc.
Según estudios, el 32% de los alumnos que salen del colegio, algunos sin terminar sus estudios secundarios,  se dedican a laborar informalmente o sencillamente no trabajan, aumentando la carga de desocupación e incidiendo en la pobreza.
Los casi once años de escolaridad no sirven para nada, el alumno egresado en su mayoría sale de las aulas sin ninguna competencia útil, no puede emplearse en una empresa moderna, no tiene formación para realizar su propio negocio. Los alumnos deberían egresar del colegio teniendo los conocimientos básicos para un examen de admisión sin necesidad de ingresar a una academia pagando casi lo mismo que una pensión escolar para que aprender lo que debieron enseñarles  en el colegio, viéndolo desde este punto de vista, sería necesario un año más de secundaria en el cual puedan prepararse mejor, para que sean capaces de afrontar los estudios superiores, y si no tuviesen la oportunidad de estudiar en una universidad o instituto, por lo menos salir del colegio con conocimientos útiles que los ayuden a formar su propia empresa o no tener la necesidad de recurrir a un trabajo no digno, como se da en los casos más extremos, como es la prostitución, la delincuencia, las estafas, lavado de dinero, el narcotráfico, entre muchas otras situaciones que afectan nuestra seguridad y desarrollo del país.
Al parecer la educación aquí en Perú, se ha convertido en un negocio con las universidades, institutos, e incluso con las editoriales, en lo que va del año se vienen escuchando varios casos de libros con errores que confunden a los niños más pequeños de primaria. Por otro lado, muchos centros de estudio persisten con el viejo modelo de educación memorística y teórica, alejada de la gran problemática real; pretendiendo instruir y no educar. Sus objetivos están centrados en preparar alumnos para el corto plazo; es decir para el ingreso a la universidad, no teniendo una visión integral de la formación educativa del alumno. Estas instituciones asumen una misión mercantilista de la educación, son los comerciantes de la educación que han creado asimismo sus propios estándares que vienen a ser formas de competir como: ganadores de concursos, victorias en proyectos especiales, tasas de ingreso a las universidades y otros.
Pero ¿Y qué pasa con los niños que radican en las zonas más olvidadas del país? Saliendo del tema que se presenta en la mayoría de colegios privados, vayámonos a la problemática en las zonas rurales y los colegios estatales, donde los alumnos no tienen acceso a los diferentes servicios a los que tienen derecho, como lo es un salón con buenas carpetas y que no se esté cayendo por pedazos, útiles escolares y libros sin errores, se debería mejorar la infraestructura y capacitar a los profesores y lamentablemente, es un hecho que siempre se repite, padres con escaza educación; hijos con escasos logros escolares y, mientras más lejano es el lugar, es más pobre el nivel de aprendizaje en los alumnos.
“Un buen profesor es aquel que hace nacer en el alumno un deseo grande de aprender y no llena de puro conocimiento”. (Arthur Graf) pero hoy en día los profesores solo se encargan de enseñar y los alumnos no tienen ese sentimiento de querer aprender más cada día, muchos profesores se dedican solo a imponer tareas y no siempre cumplen con su labor, además muchas de las técnicas de enseñanza que usan la mayoría de profesores causan que los alumnos presten atención solo durante 3 minutos, cuando una hora de clase dura aproximadamente 45 minutos, a continuación se mostrará una lista de algunas acciones o actitudes que se presentan en los colegios y son causadas, algunas veces, por los profesores:



1). Incapacidad de reconocer errores. Bajo la premisa de que el director o el profesor (las autoridades) jamás se equivocan, estos nunca aceptan públicamente haber errado, ni se disculpan. En los casos de errores evidentes, le echan la culpa a algún subordinado o al público que "entendió mal".

2). Actitud sumisa, pasiva-agresiva. Bajo la premisa de que el alumno debe acatar sumiso lo que el profesor-autoridad disponga, o inclusive el abuso de sus compañeros más fuertes sin quejarse ni acusar, hay alumnos que son objeto de sistemática discriminación, burla, maltrato psicológico o físico, y se ven obligados a aguantar porque "así son las cosas". Estas personas, mientras no tienen poder, se someten al maltrato. Pero el día que tienen poder, actúan con los demás como lo hicieron anteriormente con ellos.

3). Asumir que el profesor o la autoridad que tiene el poder siempre tiene la razón. Es aquí cuando se pierde el respeto entre alumno y profesor, que debería ser el mismo entre ambos.

Una de las consecuencias de la baja calidad de educación en nuestro país es La frustración profesional notoria. En discursos muy bien preparados se afirma que el Perú posee a los taxistas mejor preparados del mundo, desempeñando este respetable oficio encontramos a ingenieros, profesores, abogados, administradores, contadores, etc. incluso algunos de ellos con estudios de post grado. La pregunta es ¿Qué paso con los educadores que condujeron la educación y el aprendizaje de estos profesionales? ¿El sistema educativo peruano cumple con la labor encomendada?

El profesional peruano con frecuencia afirma “lo que estudie en la universidad no me sirve de nada para lo que hago ahora…, los que dedicamos tanto tiempo y dinero a estudiar con los que no lo hacen estamos iguales”. Lo que sucede es que el sistema educativo enseña a resolver problemas que tienen respuestas sin ambigüedades, y en la vida cotidiana nos encontramos con problemas con soluciones ambiguas, que su solución o no solución depende de la situación imperante, el profesional debe ser capaz de resolver este tipo de problemas. El educador peruano no desarrolla ese enlace indispensable entre la teoría y la realidad, por lo tanto el aprendizaje no es válido.

A mi parecer, la falta de presupuesto e inversión no debería ser excusa para tener una buena calidad de educación con métodos modernos y alumnos que egresen  del colegio e inmediatamente comiencen con sus estudios superiores, la principal preocupación del gobierno, debería ser la educación, sobre todo en las zonas rurales, además de los valores que deben manifestarse en los colegios y sobre todo preocuparse por el futuro de muchos niños peruanos que aún no conocen lo  que es un colegio de verdad.


En síntesis, la educación no está dando el resultado que debería, en cambio, pareciera que en vez de progresar, empeora. Basta ya de clichés y falsas promesas de políticos que año tras año nos aseguran un cambio, es tiempo del progreso nacional, el cual debería iniciar principalmente por la educación.

Por: Valeria Calderon

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